jueves, 20 de junio de 2013

Rápidos



Rápido es el deporte que se practica en ríos belicosos, consiste en recorrer la dirección de la corriente, los ríos que se navegan presentan dificultad al recorrerlos, llamados ríos de aguas blancas, debido a que este color es característico de la espuma que genera la turbulencia en los cuerpos de agua, otra denominación común para este tipo de ríos es simplemente "rápidos".
Las embarcaciones más comunes que se utilizan son la balsa y canoa, que pueden ser rígidas o inflables, esta actividad se conoce también por la palabra “rafting”, en el descenso de ríos existe una clasificación internacional ampliamente aceptada para clasificar los ríos según su grado de dificultad al navegarlos, “aguas planas” “clase 1 y clase 2 que resultan sencillos de recorrer o sea que el grado de dificultad es mínimo.
La clase 3, considerada de nivel intermedio son aguas turbulentas con huecos y olas medianas aproximadamente de un metro, con remolinos que ponen en peligro a los nadadores y a determinadas embarcaciones, por lo que requiere técnica y conocimiento del río porque el siguiente nivel, es decir, el río clase 4 que contiene aguas blancas muy turbulentas pero de alguna manera predecibles, ahora los huecos y las olas pueden medir hasta dos metros con remolinos fuertes y peligrosos, tal vez algunas cascadas, así que la exigencia de conocimiento y habilidad es mayor porque existen pasos estrechos que exigen maniobras complicadas.
La clase 5 es de aguas blancas muy turbulentas y poco predecibles, ahora los huecos y las olas superan los dos metros con remolinos y cascadas de alto riesgo, va a ser necesario que quienes intenten una aventura en este tipo de río, sean expertos con un alto conocimiento del río que pretenden conquistar, porque las maniobras serán de riesgo extremo, de ninguna manera es recomendable que acudan principiantes a este tipo de reto. La clase 6 simplemente no es navegable, se considera muy difícil o simplemente imposible de conquistar.
Muy importante es comprender que no todo río rápido tiene una misma clase en toda su extensión, generalmente muestra una sucesión de tramos donde aparecerán tal vez todas las clases y algunas de ellas dos y hasta tres veces en el recorrido, lo mejor es tomar como punto de referencia la clase de mayor dificultad hasta la mínima, lo cual permite trazar un proyecto de recorrido con cierta seguridad.
Este deporte requiere un estricto dominio del equipo, el adecuado uso de los dispositivos, conocimiento de las metodologías básicas de impulsado y rescate, es indispensable aún cuando se va con un guía experto en descenso de ríos, desde luego que es fundamental realizar esta actividad con el equipo adecuado como es el casco que protege la cabeza con seguridad, chaleco salvavidas, calzado apropiado, traje de neopreno, casco extensible de emergencia y cuchillo especial.
El guía, que también se le denomina timonel, debe ser muy experimentado y con sólidos conocimientos de los rápidos del río de acuerdo a la clase que pertenece, el equipo humano debe prever cuerdas de rescate, bolsas secas, alimentos, agua potable, bomba de aire botiquín de primeros auxilios, silbato de ordenes y lo que cada expedición reclame de acuerdo al grado de dificultad.
Todo guía de una embarcación para descenso de ríos domina los siguientes aspectos técnicos:
El manejo de todo el equipo especial en este deporte extremo.
Saber “leer el río”, interpretar adecuadamente sus turbulencias, remolinos y muchas disciplinas más, necesarias en este bello deporte.
Conocer y dominar las señales básicas de comunicación, de rescate tanto de personas como de embarcaciones, estar listo, siempre listo a decidir aunque sufra alguna tragedia y hacer que el paseo en un rápido se grabe indeleblemente en cada una de las personas que asisten a este tipo de aventura.


miércoles, 19 de junio de 2013

Bicicleta de montaña

Cuentos y más
Sentir la velocidad es parte de la esencia del ser humano, no importa ganar o perder, caer y levantarse, subir y bajar, percibir el contacto no solo con la naturaleza sino admirar la grandeza de nuestro mundo y al mismo tiempo la pequeñez de nuestro cuerpo y de nuestro ser, ese es el sentir cuando subo y bajo montañas con una bicicleta, tan grande o pequeña, como la sienta mi cuerpo en el momento de superar los obstáculos que la misma naturaleza interpone en mi camino, eso es vivir.
Iniciar una experiencia en bicicleta de montaña es posible solo cuando se ha experimentado un trabajo teórico previo ya que implica una serie de conocimientos desde la manera de “engrasar” las cadenas de tracción que permiten el movimiento de la bicicleta en todo momento, hasta el ajuste del asiento que se realiza de acuerdo a las características anatómicas de cada integrante del equipo, que pretende iniciar una aventura en bicicleta que se antoja será inolvidable, como lo indica la misión de nuestro grupo “Retto expediciones” en el recorrido que haremos rodeando la montaña conocida como “Malinche” en el estado de Puebla, México.
En este momento recuerdo cuando vi por primera vez una extraña bicicleta de montaña, con ruedas gruesas, más allá de las ruedas de bicicletas convencionales, era un grupo de ciclistas desconocidos pero me atrajo de tal manera el grupo organizado con ropa y accesorios poco convencionales, pero muy atractivos, sin embargo, mi curiosidad fue tan aguda que a los pocos días ya me encontraba solicitando datos de ese tipo de vehículo que sin duda estaba adquiriendo una popularidad extrema y la verdad es que no podía quedarme rezagado ante este “retto” que la vida me estaba mostrando con una sencillez asombrosa.
Hasta que logré integrarme a un grupo que disfrutaba plenamente de esta disciplina hasta entonces desconocida en mi medio, por lo que luché en el aprendizaje y tracé mi nuevo “retto” hasta que la invitación se hizo realidad y la disfruté desde la mañana que más bien parecía de noche cuando acomodamos las bicicletas en una camioneta y nos dirigimos a un pueblo del estado de Puebla conocido como “San Miguel Canoa, ubicado en la base de la montaña “la malinche” y allí descargamos las bicicletas e iniciamos nuestra gran aventura.
Ocho personas integramos el grupo que me inició en este maravilloso episodio, muchos fueron los metros y kilómetros recorridos, previamente nos repartimos alimentos, agua y refacciones suficientes inclusive si nos enfrontáramos a situaciones imponderables, la técnica de repartición tiene el objetivo de distribuir el peso de las cosas, pero lo curioso fue que la gente del lugar nos miraba como si se tratara de seres de otro planeta o algo parecido pues la vestimenta indudablemente resulta poco conocida por esos lugares, además de que existen razones puntuales en el uso de ese tipo de ropa.
Poco a poco el paisaje que la naturaleza nos fue regalando se transformaba con una hermosura fantástica y con la ayuda de un día esplendoroso y claro en una altura de 2900 metros sobre el nivel del mar aproximadamente, con una temperatura considero muy alta, quizás arriba de los 20 grados y con el esfuerzo que la bicicleta nos exigía, tal vez la temperatura se elevaba sin darnos cuenta y a determinadas distancias encontramos vigilancia gubernamental del sistema forestal que guarda las zonas protegidas, a la fecha podemos presumir que todavía contamos con áreas verdes bastante grandes haciendo el trabajo ecológico necesario.
Después de cuatro horas de travesía, justo era tomar un descanso que aprovechamos con los alimentos que la verdad, nunca antes había apreciado el sabor exacto, de manera que el descanso, aunque pequeño, nos permitió intercambiar experiencias que finalmente enriquecen lo vivido por cada uno de nosotros y que se transforman en vivencias, lo más seguro es que las transmitiremos a nuestros hijo y nietos, con la esperanza de que en su momento aprendan a disfrutar lo que la naturaleza nos regala cada día.
Continuamos el recorrido comenzando a sentir la emoción de librar arbustos y raíces de arboles que invaden el camino, lo que presenta un atractivo mayor a nuestra aventura obligándonos inclusive a un aumento en la velocidad sobre todo en los momentos que el terreno produce un descenso obligado, de tal suerte que simplemente nos obliga a poner en acción todas aquellas habilidades que en el curso teórico nos fueron mostradas, así que forzosamente esta vez hubo que poner en práctica lo aprendido.
Finalmente llegó la hora de recorrer el camino en sentido contrario hasta donde se había dejado la camioneta que nos transportaría al punto de partida de esa maravillosa mañana, esta vez pudimos apreciar el valle, el terreno se prestó estupendo por ser bajada y así el final de la aventura nos entregó una satisfacción que en verdad resulta difícil describir con palabras, pues lo valioso es la vivencia y de ello, cada uno de nosotros habrá de hacer una descripción única, puesto que cada uno de nosotros somos únicos, parece que no existe nadie que piense como yo pienso, que vea las cosas como yo las veo, dicho con un poco de filosofía, nadie describirá nunca el aroma de una rosa como yo lo puedo hacer en este momento, ese día, simplemente fue inolvidable.







martes, 18 de junio de 2013

Tochimilco Puebla México

Cuentos y más
Por: Julio Torres.
“Lo autentico aún existe” Mediante este título se presenta la guía turística de un pueblo maravilloso al poniente del estado de Puebla México, uno más de los pueblos mágicos de la región que como platillo principal e imponente es el espectáculo del volcán “Popocatepetl” majestuoso como obra de la naturaleza que muchas veces las palabras resultan limitadas a la hora de tratar de manejar una descripción de algo que simplemente proporciona una satisfacción al sentido de la vista.

“En la sementera de los conejos” es lo que significa en el idioma náhuatl el nombre de Tochimilco, descendiente de la cultura “Tolteca-Chichimeca”, un poblado que se encuentra dentro del paisaje que circunda el volcán Popocatepetl y curiosamente es un lugar que presenta la transición de los climas templados del valle y los fríos de las partes altas de la sierra nevada por lo que la temperatura media anual oscila entre los 12° y 18° centígrados.
Dos mil sesenta metros sobre el nivel del mar es la ubicación de Tochimilco, que partiendo de la ciudad de Puebla bastan cincuenta minutos y llegamos a disfrutar de sus envidiables paisajes naturales, pero además nos entrega un tremendo paquete histórico ya que las culturas asentadas en ese lugar justo con la llegada de la cultura española nos entregan un mosaico de costumbres que pareciera imposible de comprenderse con facilidad en unos minutos de estancia en el lugar, tal vez, estacionarse uno o dos días en ese pueblo mágico, la satisfacción sería completa.
Destacan edificios construidos a base de piedra volcánica oscura, inclusive bastante oscura, ejemplo testigo de las culturas es el atrio de un ex convento franciscano que da la impresión de una fortaleza porque está rodeada o terminada en almenas y al parecer la dirección de esta maravilla de construcción corrió a cargo de Fray Juan de Alameda y Fray Diego de Olarte.
“Fuente de los sabores” única en su estilo que fue construida en el siglo XVI por manos indígenas y que permite apreciar la mezcla de las culturas, por un lado cada una de las columnas poseen figuras en forma de flor en cada uno de los surtidores y en la parte superior la representación de la corona real convirtiéndose así en un gran ejemplo de identidad de los habitantes de Tochimilco.
La necesidad de abastecer agua pura emanada del volcán Popocatepetl a los habitantes del lugar que desde siempre ha sido un asentamiento humano muy importante, obligó la edificación de un acueducto acorde a las necesidades también construido con piedra volcánica pues necesitaron un conducto que llevaría esa agua pura a los aljibes o depósitos que conservarían el vital líquido en condiciones aceptables, y después la llevarían hasta la fuente de los sabores.
En el renglón gastronómico no pueden faltar los deliciosos tamales de cominos, el pipián verde y el adobo sin olvidar el tradicional mole poblano con tamales de manteca, barbacoa de hoyo, frijoles de olla, tlacoyos con chicharrón, cecina, mixiotes y una tremenda variedad de platillos que el espacio me impide describir a cada uno de ellos, pues los postres no se quedan atrás con el chocolate, arroz con leche, el champurrado y atole de cacahuate, en fin, solo deseo que usted se imagine lo que encontrará cuando visite este fabuloso pueblo encantado que es Tochimilco.
Los atractivos naturales, las danzas y bailes típicos, las fiestas religiosas y las tradiciones que se celebran por los fieles difuntos y las fiestas del 3 de mayo, en fin, le invito a visitar Tochimilco a una hora de distancia de la ciudad de Puebla, en el centro de México y en las faldas del volcán Popocatepetl, espero que nunca olvide que estamos hablando de Puebla México, un mundo mágico que le espera con los brazos abiertos.




lunes, 17 de junio de 2013

Buceo

Cuentos y más
Nuestro mundo correspondería llamarse planeta océano y no planeta tierra, ya que el 75 por ciento se encuentra cubierto por agua, la gran promesa de la subsistencia humana. El hombre, está comenzando a ver el mundo acuático como proveedor de alimentos y como refugio adecuado y seguro ante un futuro incierto.

Literalmente es otro mundo, es como entrar en un sueño surrealista de percepción espacial, podemos sentir cada respiración, lo significa la confirmación de nuestra existencia, quedando en éxtasis en un mundo mágico de tonos azulados, con criaturas nunca vistas y solo descritas por el intrépido y legendario “Cousteau”, después de una hora de contemplación, emergemos a la superficie para caminar en la tierra y sentirnos bípedos una vez más” “se dice que en el mar no caminamos, solo flotamos”.

En la costas del golfo de México, se encuentra el complejo de arrecifes veracruzano, a cuatro horas de la ciudad de México, por la autopista Puebla - Veracruz, se encuentra la Bella ciudad “puerto de Veracruz”, con verdadero sabor costeño y con las comodidades de una ciudad moderna, existen muchas atracciones, el puerto nos regala un abanico de posibilidades susceptibles de ejecutar en sus costas, sin embargo, quienes han practicado el buceo dicen haberse se iniciado en este puerto maravilloso.

La ciudad cuenta con hoteles para todos los presupuestos, hoteles de tres y cuatros estrellas, o incluso una zona con hoteles de gran turismo para los muy exigentes. Además del Buceo, en Veracruz podemos disfrutar de una gran variedad de atractivos turísticos: como “el Baluarte de Santiago” “la casa del Santo Oficio” “el ex-convento de San Francisco” “el Faro Venustiano Carranza” “el Hospital San Sebastián” “Catedral, Palacio Municipal, Santuario de la Reforma” “Templo del Cristo del Buen Viaje” “edificio de la Aduana” “edificio de Correos y Telégrafos y los Portales.

Entre los museos de la ciudad, mencionaremos el de arqueología, historia, cultura de la ciudad y el fuerte de “San Juan de Ulúa”. Además de un importante atractivo que no podemos dejar de visitar, el Acuario de Veracruz, que se inauguró en 1992 y que nos da un pequeño adelanto de lo que veremos en sus arrecifes, ahora es tiempo de dirigimos a la tienda de buceo y ordenar nuestros equipos, algunos están en su viaje de certificación, es decir, es la primera vez que experimentarán el buceo en el mar, se percibe sensación de nerviosismo y expectación de que estamos a punto de realizar algo nuevo en nuestra vida.

Cada uno de nosotros revisa: aletas, “máscara de buceo”, “snorkel”, neopreno, regulador, chaleco compensador y tanque de aire, ahora es momento de acudir a la embarcación equipada y acondicionada que nos brindará la oportunidad de una nueva experiencia, viajaremos una hora y media aproximadamente, hasta llegar a lugares lejanos del arrecife,: la Anegada de afuera y “Santi guillo”, con mar en calma, recorremos el trecho que nos separa de la aventura, pasamos entre la Isla verde y la Isla pájaros para después dirigirnos un poco mas al sur hacia el área de “Antón Lizardi”. En el camino armamos nuestros equipos de buceo colocando el tanque en el arnés del chaleco y colocando el regulador en el tanque. Probamos que cada pieza funcione a la perfección, ya que nuestra seguridad y disfrute depende de su perfecto funcionamiento.

Por seguridad nos organizamos en parejas y así nos tiramos al agua, al mejor estilo de los buzos: hacia atrás y ya que estamos todos en la superficie, damos las últimas indicaciones y comenzamos la inmersión por el cabo del ancla que nos ayuda a mantenernos juntos de dos en dos, desfilamos el chaleco compensador y nos adentramos en un mundo en donde el sonido viaja 25 veces mas rápido que en aire, las cosas se ven 25 por ciento mas grandes y 33 por ciento mas cerca, esto debido a un fenómeno provocado por el cristal del visor, tal vez de ahí viene la fama de los buzos de ser exagerados.

Cuando alguno de los principiantes manifiesta problemas, simplemente bajamos más despacio con él, soplando por la nariz igualando la presión del agua que aumenta una atmósfera cada 10 metros, al llegar al fondo, el grupo se reúne, felicitamos a los principiante dándoles un fuerte apretón de manos por haber llegado al fondo por primera vez y puntualizamos que los colores se han tornado azulados debido a que la luz no puede penetrar en el ambiente denso del agua.

El recorrido a quince metros de profundidad, tal como lo acordamos previamente en nuestro plan de buceo, en ese lugar los principiantes permanecerán en el banco de arena para realizar algunos ejercicios de práctica, mientras los demás miembros del grupo inician su recorrido en el fondo marino, las primeras formaciones que vemos son un grupo de corales cuerno de ciervo, registradas así, por estar pegada al arenal, no se ve el macizo de coral blanco, conforme avanzamos, descendemos a mayor profundidad y el banco de piedras y coral blanco va tomando forma ante nuestros ojos, existe gran cantidad de cerebros o “coral múcura”, corales que como su nombre común lo dice, semejan un gran cerebro que puede llegar a medir varios metros de diámetro.

Entre las piedra encontramos un pez cirujano y mas abajo un pez piedra, que presenta un camuflaje perfecto, ya que tiene la capacidad de mimetizarse con la roca, y hay que tener mucho cuidad pues sus aletas dorsales que pueden inyectar un poderoso veneno, pero si no se le molesta o toca es inofensivo, mas adelante se nos une una escuela de barracudas, peces que tienen un fiero aspecto, pero en realidad no atacan a los buzos, lo que a veces provocan desconcierto y sacan de sus casillas a los buzos, ya que por curiosidad pueden rondar por mucho tiempo alrededor de ellos.

Entre las rocas, descubrimos también una gran cantidad de arbolillos de Navidad, en realidad son gusanos de tubo, estos gusanos parecidos a pequeños pinitos sobresalen unos 10 o 20 centímetros de las rocas y cuando intentas tocarlos se meten en un abrir y cerrar de ojos desapareciendo como por arte de magia, seguimos nuestro recorrido y hemos llegado a 70 pies, equivalente a 21 metros, es la máxima profundidad que alcanzaremos durante la inmersión, aquí descubrimos un banco enorme de peces plateados que pasa semejando a una gran roca movible, uno de los buzos se distrae con el espectáculo y sin querer roza un coral anaranjado, inmediatamente siente ardor y picazón se topó con un coral de fuego, que como protección genera una sustancia compuesta de proteínas con gran capacidad irritante.

Durante el recorrido vemos algunas morenas, peces loro y algunos más, uno de los buzos se percata de que su manómetro marca bajo suministro de aire, nos agrupamos nuevamente e iniciamos el ascenso lento hacia la superficie, para evitar la enfermedad de la descompresión, realizamos una parada de seguridad a 5 metros de profundidad y después emergemos a la superficie, felices de nuestro paseo submarino. Y en la embarcación, comentamos la experiencia sobre las maravillas que contemplamos, preguntamos al grupo de estudiantes e invitamos a describir cómo les fue y están maravillados por su experiencia, aunque estuvieron la mayor parte del tiempo practicando las destrezas básicas del buceo pues fue su primer contacto con este mundo y esa primera vez nunca se olvida.

Regresamos al puerto y nos reunimos a comer en el centro de Veracruz entre marimbas y agua de horchata además de un festín de mariscos y seguimos contando las historias de esta maravillosa actividad: El buceo.